Canyons of the Ancients

Con una extensión de 71 225 hectáreas, el paisaje cuenta con decenas de restos bien preservados de las culturas nativas de la zona, como las ruinas de hogares, embalses, santuarios, granjas y aldeas enteras. La mayoría de las estructuras de piedra del monumento datan de la época de la antigua tribu pueblo, quienes primero construyeron estructuras básicas y con el tiempo terminaron con una aldea. Se cree que en algún momento a mediados de los años -1100 dejaron la región y se trasladaron a lo que ahora es Arizona y Nuevo México.

Explorar Canyons of the Ancients (Cañones de los Antepasados) es una oportunidad única de observar, estudiar y experimentar la forma en la que los ancestros vivían y se adaptaron a través del tiempo en el suroeste de Estados Unidos. Sin contacto con el desarrollo, este remoto y accidentado paisaje ha preservado reliquias de la humanidad de hace miles de años. El extenso terreno alberga hermosos cañones aislados con ruinas increíbles y, generalmente, a pocas personas. Puede ser difícil llegar a algunos sitios sin no se dispone del tiempo suficiente, pero hay tantos objetos de valor arqueológicos esparcidos por este lugar, que sería prácticamente imposible explorar toda la zona.

Los visitantes que planean explorar el monumento deberían hacer una parada en el Anasazi Heritage Centre (Centro Patrimonial de los Anasazi) primero (a 16 kilómetros al norte de Cortez y a 5 kilómetros al oeste de Dolores) para orientarse y obtener información sobre las condiciones actuales. Los caminos alrededor del área no están pavimentados, por lo que se recomienda el uso de un vehículo apto para caminos rústicos. Hay muchas actividades para los distintos gustos disponibles en el monumento, como ciclismo, sitios para acampar y para practicar senderismo.

Contenido creado originalmente para Atlas Obscura.